sábado, 7 de mayo de 2011

Imprudencia.

Pareciera que el procedimiento de Barak Obama para ganar puntos en su desvahida gestión (no ha cumplido importantes promesas de campaña como cerrar la prisión de Guantánamo o retirar las tropas de ocupación en Afganistán (ver la película "Hermanos" de Jim Sheridan, con Tobey Maguire, Alan Shepard, Natalie Portman, Jake Gyllenhaal, una formidable "parábola" acerca de las consecuencias de estar en territorio ajeno sin justificación alguna). La sórdida ejecución con la consiguiente "desaparición" del cadáver de Bil Laden, herido y rematado estando desarmado...en territorio pakistaní y en presencia, al parecer, de una criatura de doce años...no termina de satisfacer a los medios de información serios. Es más, evidentemente, lo que se oculta que lo que se manifiesta entre contradicciones. Pero Barak Obama se ha mostrado satisfecho con la firme creencia de que el mal y el peligro para la nación que preside al fin ha desaparecido. Otro presidente, Alan García también ha hecho una insólita y ridícula afirmación, atribuyendo la deseada muerte de Osama Bil Laden a un milagro del flamante Beato Juan Pablo II. Se dice que, en el mundo árabe, en general Bil Laden no gozaba de demasiadas simpatías por su aspiración a un califato, en circunstancias en que las naciones árabes están exigiendo democracia y derechos de los que han carecido por muchísimo tiempo. La verdadera situación y el alcance de las amenazas que Alkaeda ya ha proferido contra Estados Unidos por el asesinato de su líder en realidad se desconoce pero no es arriesgado presumir que los temidos peligros siguen pendientes. La política exterior de Estados Unidos ha alentado dictaduras, ha invadido con falsos pretextos inventando guerras despiadadas para apropiarse de recursos que considera esenciales para mantener su estatus, como el petróleo, más la enormidad de bases militares diseminadas por el mundo, amén de meterse en contiendas ajenas en nombre de unos valores democráticos que pisotea constantemente, no hace que la mayoría del mundo se conduela por su porvenir.
Y queda pendiente en medio de tantos probados shows mediáticos si Bil Laden fue el propulsor del ataque a las torres gemelas o, simplemente, se trató de un muy bien fraguado autoataque para encontrar los pretextos necesarios para avanzar sobre oriente. En Nueva York, en el punto cero que recuerda la tragedia...murieron alrededor de tres mil personas ( en gran mayoría personal de servicio, latinos, negros y se sabe que hubo avisos muy temprano para que ciertos relevantes personajes no se acercaran por el Trade Work Center). Todos compartimos el duelo. Ahora bien...¿alguien lleva la cuenta del número de muertos en Irak, Afganistán, y ahora en Pakistán con esos diabólicos aviones no tripulados? ¿Quién habrá pisoteado más las convenciones de Ginebra? ¿Quién es responsable de la mayor mortandad de civiles? ¿Realmente podrá vivir en paz y seguridad el pueblo norteamericano con semejantes gobernantes desprovistos de escrúpulos? Sería mejor que Obama cumpliera sus promesas, retirara las tropas de Irak e Afganistán, cerrara la prisión de Guantánamo que ofende a Cuba con su presencia, clausurara las fábricas de armas y se ocupara en serio de su pueblo, de los cientos de miles de desempleados, de tantísimas personas sin hogar, sin derecho a la salud y a un futuro sustentable en lugar de continuar las infames políticas, inclusive las financieras, de George W. Bush.
Así que considere sus graves imprudencias en lugar de cantar tan triste victoria, Sr. Barak Obama. Me pregunto, si su nombre Barak, que recibió de su padre, tendrá que ver con Baraka, una expresión de Bendición tan sagrada para los Sufis...y que, en ese caso, usted no está honrando como debiera por su propo bien.

2 comentarios:

  1. Disculpen. Debí poner Bin Laden en lugar de Bil. Hay que cuidarse del exceso de entusiasmo y cuidar la calma al escribir. Ángela Cáceres.

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  2. Tienes mucha razón en tu post. En verdad deberías tener una columna de opinión en un periódico! y si fuera de Estados Unidos , mejor. A ver si los seguidores de Obama ven un poco más allá de su nariz. Aquí se vota al menos peor, eso es lo que harán para el 2012. Aquí no hay fuerza contestataria y los demócratas que son el mismo perro pero con diferente collar, son lo defensores de los pobres jeje rídiculos! Me dió mucha pena ver millones en la Casa Blanca el día que asumió Obama festejando el CHANGE, change en el cual muchos nunca creimos. Ni siquiera creimos en que el asumir un afro americano a la presidencia haria un cambio sustancial para empezar en el tema racial. El racismo de las campaña contra los inmigrantes es la prueba.

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